Hoy es uno de esos días en los que todo te recuerda algo o a alguien, en este caso, alguien... Nala, nuestra perrita, la que estuvo con nosotros 14 años.
Todos los días hay algo que me la recuerda, y si no, ya tengo el precioso tatuaje con su huella para poder llevarla conmigo siempre. Pero hoy he encontrado varias fotos y datos que me han hecho pensar...
En facebook veía a primera hora una foto de un perrito anciano, hay miles de perros que son abandonados por ser ancianos y suponer muchos gastos ¿es que un cachorro no los tiene? pero claro los cachorros son muy monos y graciosos!!
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Nala es cierto que pisaba el veterinario para sus vacunas y poco más, y si que es cierto que cuando se hizo mayor tuvo que ir más veces. Pasó por una piómetra con 13 años (ya que cuando era más pequeña no había toda la información que hay ahora sobre la esterilización y no nos planteamos que al no castrarla podríamos tener que enfrentarnos a eso). La pobre lo pasó muy mal, y estuvimos temiendo que se iría, sin embargo el veterinario aunque no veía mejoría, tampoco empeoraba así que el tratamiento fue haciendo efecto y mi pinsesota nos regaló otro año más de su compañía.
Está claro que el tratamiento fue un dinero, que teníamos que pincharla todos los días, que algunos pinchazos la ponían muy malita..., pero era fuerte. Lo más rastrero por nuestra parte habría sido abandonarla en ese momento. Sin embargo hay mucha gente sin escrúpulos y lo que es peor, SIN CORAZÓN, que cuando se hacen mayores, y empiezan a tener distintas enfermedades, o empiezan a perder visión, audición, los tiran a la calle o a las perreras como si fueran basura... cuando la única basura ahí son ELLOS!
Ese perro que durante años te regalo un cariño incondicional, que te acompañó en lo bueno y en lo malo, que nunca NUNCA te habría abandonado, que te ha sido leal... sólo por ser mayor ¿ya no tiene derecho a tu cariño? eso es MISERABLE y EGOÍSTA! ¿Cuando el nos da cariño bien, pero cuando él lo necesita lo echamos a la calle? A todas esas personas, sólo les deseo que la vida se lo pague de la misma manera, porque todos nos hacemos viejos (no sólo los perros) y algún día se sentirán débiles, y necesitarán cuidados y cariño, y ojalá se acuerden de ese perro que nunca les habría dejado y ahora podría ser su apoyo, y de cómo lo abandonaron cruelmente, y se sientan la peor mierda del mundo!
Aún recuerdo los últimos momentos con mi pinsesota, se nos partía el corazón (y aún hoy se me parte al recordarlo), pero era lo mejor para ella, porque estaba sufriendo y casi no podía ni andar, la dimos todo lo que estuvo a nuestro alcance, y ella nos dio mucho más! La acompañamos hasta su último aliento y por eso se que ella sigue acompañándonos desde donde esté hasta nuestro último aliento también.
Ojalá pudieran estar con nosotros siempre, aunque en cierto modo yo creo que siempre lo estarán, quizá no físicamente, pero siempre en nuestros corazones.
Un perro mayor no es menos perro, no te quiere menos, no se merece menos cariño, al contrario, te necesita más y sólo por todo lo que nos ha dado durante años se merece que estemos ahí para él. Lo mismo con los perros mayores cuyos dueños han abandonado y están en perreras y protectoras esperando una oportunidad. Quizá no hayamos pasado toda la vida con él, pero por todo ese amor que quizá no haya recibido antes, merecen una oportunidad, la oportunidad de vivir en una casa donde se le quiera, para que su marcha de este mundo pueda reconciliarle con el ser humano.
Gracias a mi pinsesota por abrirme el corazón y mostrarme todo lo que un perro puede hacernos sentir, todo lo que nos puede aportar. Y gracias por toda una vida a nuestro lado y por todo lo que haces y nos ayudas desde donde estés.
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