Disfrutar al sol...

Parece que ya empieza a hacer buen tiempo! Hoy es un día raro, a ratos hace mucho sol y otros ratos no hay sol... pero últimamente los días en el parque ya empieza a hacer mejor. Ya no hace tanto frío como antes, lo que pasa que cuando da mucho el sol yo empiezo a tener mucho calor y a necesitar agua.

Henar me ha dicho que cuando hace calor los perros necesitamos beber más agua para... hidratarnos, así que si hace mucho calor no olvidéis dejar agua al alcance de vuestros perros! Además por lo que me ha explicado, al tener el pelo negro, yo cojo el calor de la calle mucho más rápido que los perros de pelo blanco.

Sin embargo, me gusta..., qué digo! me encanta el sol! desde pequeño me ha encantado tumbarme al sol... aquí en casa hay un trocito de patio donde a veces hace sol y yo aprovecho para tumbarme y relajarme...

De esta foto, ni me enteré! estaba tan relajado!! Y por supuesto, si tengo un sitio cómodo para tumbarme... pues mejor que el suelo!

Lo malo es que no siempre da el sol allí, sólo un poco por las tardes, lo bueno es que hay otro trocito más pequeño donde da el sol por las mañanas, así que voy cambiando...

Como veis aquí era más pequeño porque son del año pasado, porque este año, desde que empezó a hacer frío, aún no he salido a relajarme al sol... aunque ya tengo muchas ganas!!


Como ya visteis en las fotos cuando os hablé de la mamá de Henar en cuanto puedo tumbarme al sol... y además estar en brazos... no pierdo ocasión!!


Claro que como ya os digo, a veces, sobre todo en el parque si estoy corriendo o jugando, tanto calor me hace cansarme mucho más y tengo que ir a buscar la sombra para tumbarme un rato y recuperar un poco de fuerzas...

Eso sí... no por ello me separo de mi pelota! ¿Os he contado que me encantan? Bueno pues me lo apunto para otro día!


A ver si empieza a hacer más sol... que tengo ganas ya de tumbarme un poco a relajarme!! Y a vosotros... ¿os gusta tumbaros al sol? ¿o preferís la sombra?

Yo crezco y las cosas encogen!

Cuando os hablé de la mamá de Henar os dije que ella me hizo muchas camas cuando era cachorro, porque como cada vez era más grande, cada vez necesitaba una cama más grande...

Es curioso cómo a medida que iba creciendo... todo se iba haciendo más pequeño a mi alrededor, no sólo mi cama!

Al llegar yo, Henar tuvo que hacer hueco en su habitación para meter mi cuenco con agua, mis cosas y mi cama (aunque ahora duermo en el salón), y como tenía que quitar alguna cosa, quitó una mano gigante. Me han dicho que era un sillón y no una mano de verdad, y menos mal! porque si la mano era así de grande como sería el dueño de la mano!! (es el mismo sillón que os comentaba en este otro post)

La sacaron al salón y a mi me encantaba tumbarme encima porque era muy cómoda, al principio no podía subirme porque yo era muy pequeño (tenía un mes y medio) y la mano era gigante...

¡Feliz día del libro!

Hoy estaba preparando otra cosa para contaros, cuando Henar me ha sugerido que preparara algo para felicitaros el Día Internacional del Libro, ¿el día qué? ¿de qué?

Seguramente vosotros ya lo sabíais pero para mí aún hay un montón de cosas nuevas!

Por lo que he leído  "el Día Internacional del Libro es una conmemoración celebrada a nivel mundial con el objetivo de fomentar la lectura..." (Wikipedia), y más cosas que no he entendido bien.

¿Y por qué hoy? Si hoy es un día normal como el resto, ¿no?... me he levantado, he dado un paseo, he vuelto a dormir un poco, hemos ido al parque, he jugado con la pelota, con otros perros... ¿por qué hoy? Pues por lo visto porque...

Conociendo los... aspersores!!

Hace unos días encontré algo nuevo en el parque... dice Henar que se llaman aspersores... una palabra muy rara... pero qué divertido! 

Además hacía un poco de calor y me quedé muy fresquito después de jugar con ellos!

De pequeño alguna que otra vez jugué con otros, pero en seguida me ponía a ladrarlos y como era muy tarde Henar decidía seguir con el paseo... Quizá por eso, porque ahora podía jugar todo el tiempo que quisiera con ellos, no paré de intentar cazar el chorro!

El vídeo es de cuando llegamos, pero no veáis lo decidido que iba al final!! Casi, casi consigo atrapar todo el chorro en mi boca!! pero uf! era mucho!!

Ella... Henar!!

Como habéis visto, el blog se llama "La vida con seis patas", pero yo sólo tengo cuatro, así que hoy voy a hablaros de Henar, de esas dos patas que caminan a mi lado día a día. 

Ya os he hablado un poco de ella, ya os he dicho que es mi dueña, que estuve con ella cuando era muy muy pequeño y que desde el primer día me cuidó y me dio muchos mimos.

Estos fueron los primeros días con ella

Después de estar con mamá Ona un tiempo, los dos
nos pusimos muy contentos por volver a estar juntos!

Mirad qué grande me hice!! (y ahora aún soy más grande!)

Nos entendemos divinamente, hay cosas que me dice que ya entiendo como “comer” y como es algo que me gusta giro la cabeza hacia un lado, y ella me sonríe, y entonces no se qué me gusta más si la palabra o que ella me sonría.

Me encantas las caricias!

Otras veces ni siquiera me dice nada, me mira y yo ya se lo que quiere, aunque a veces intento no hacerla caso, porque quiere que me siente o que me quede tranquilo y yo quiero seguir jugando con alguna cosa que he robado (como hacía en navidades con las piñas del árbol que había en el salón).

A veces se tumba conmigo y
simplemente dormimos juntos

También juega mucho conmigo, me lleva al parque, me pasea, me da de comer, también me riñe cuando hago cosas que no debo, pero luego me da muchos mimos, se tumba conmigo y me cuenta cosas.




Algunas cosas son divertidas y se ríe mucho, otras veces me cuenta cómo llegué a estar con ella aunque se la olvida que yo también estaba allí y hay cosas de las que me acuerdo.

¡Mirad cómo he crecido!

También me cuenta cosas sobre otra perra que estuvo con ellos en casa, se llamaba Nala y me cuenta cosas sobre ella, a veces se pone a llorar y entonces yo empiezo a oler sus lágrimas y a limpiarselas para que no se preocupe.

Está un poco loca, porque a veces me canta cosas y baila conmigo, a mi no me gusta mucho que me agarren las patas, pero no me importa si mientras puedo darla lametones o fisgar desde esa posición privilegiada lo que hay en las encimeras de la cocina.

Foto de: FotoStudio Digimag

Me da muchos abrazos y muchos besos, me dice muchos piropos y me cuida mucho.

Ella siempre me dice que vamos a estar siempre juntos, y yo así lo espero porque si cuatro ojos ven más que dos... seis patas caminan mejor que cuatro ¡y que dos!